Maestro, ¿cómo le va enseñando a las nuevas generaciones?
“El aula es hoy un espacio cada vez más
extraño para el alumno, donde pasan cosas que no tienen nada que ver con lo que
ocurre en el resto de la sociedad".
Juan Ignacio Pozo
La relación
entre docentes y estudiantes es un tema que siempre ha sido causa de estudios y
debates, pero aunque pasen los años, siempre será un asunto actualizado pues
esa relación cambia de acuerdo a los cambios que se vayan suscitando en la
sociedad.
Por ello, en
la actualidad, de acuerdo a los cambios que se vienen dando a nivel global, el
progreso de las tecnologías de la información, las nuevas formas de interacción
social que están surgiendo a partir de las redes sociales, es necesario volver
a formular la pregunta del título de este post.
Esa
relación entre docente y estudiantes tiene varias aristas o variables que han
sido estudiadas en innumerables tesis, pero también es necesario abordar el
tema desde la perspectiva de las generaciones sociales. Me refiero a que cada
grupo de personas está clasificada por edades y ello es muy útil porque “tener información sobre un colectivo, y
sobre cómo este interactúa o reacciona a los sucesos económicos, sociales o
tecnológicos que suceden a su alrededor es una herramienta muy valiosa”[1].
Considero que tener presente esta clasificación es de suma importancia porque
nos permite conocer como maestros cómo se comportan realmente nuestros
estudiantes frente a las diversas situaciones que surgen en su contexto, lo que
a ellos les interesa y provoca su atención, a cómo interactúan y se relacionan
entre ellos, pues de esa forma, ellos enfrentarán el futuro. Por ello, existe
una frase que indica “que los jóvenes se parecen más a su tiempo que a sus
padres”. Y nosotros, los docentes, no podemos pasar por alto, sobre todo en
estos tiempos que cada vez se hace más real el título entre los docentes de “maestros
del siglo pasado con alumnos del siglo presente”.
Entonces, entendamos esta clasificación y esa
relación para poder estar a la altura de las necesidades de esta nueva
generación que pide una escuela que los comprenda, pero a la vez poder
prepararlos para que afronten los nuevos retos que se les avecinan en el
futuro. La clasificación es la siguiente:
 |
| Elaboración propia |
Ahora
bien, al observar la imagen, ¿a qué generación pertenece usted y a cuál sus
estudiantes? Es notoria la distancia que nos separa entre docentes y
estudiantes. Esto no llamaría la atención sino entendiéramos que son nuestros
alumnos la razón de ser de nuestra profesión y que debemos prepararnos para
educar a estas nuevas generaciones que demanda nuevas formas de educación e
interacción de parte de nosotros.
Bueno,
ya se habrá dado cuenta que su estudiante pertenece a la generación “centennials”,
¿cómo son ellos? Generalmente se les caracteriza como una generación
profundamente marcada por la tecnología, el acceso imprescindible al internet y
con una gran capacidad para la creatividad y la innovación, más aún que las
generaciones antecesoras[2].
En
conclusión, considero que como docentes debemos estar atentos a todas estas
nuevas características de nuestros estudiantes y poder brindarles, desde la
escuela, las herramientas necesarias para que, como agentes de cambio del
futuro, puedan hacerlo de la manera más responsable y humanamente posible.
Interesante
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